Museo Virtual

Beitz, Berthold

Cubierta del Estadio de los JJ.OO. de 1972
Cubierta del Estadio de los JJ.OO. de 1972
Radiotelescopio de Effelsberg (1971)
Radiotelescopio de Effelsberg (1971)
Primera locomotora alemana de alta velocidad (1985)
Primera locomotora alemana de alta velocidad (1985)

Beitz, Berthold (1911-). Empresario alemán. Nació en Zemmin (Antepomerania). Su padre fue sargento de caballería durante la Iª Guerra Mundial y después empleado bancario en la ciudad báltica de Greifswald. En ella, el joven Berthold practicó con pasión el deporte (vela y remo). Tras obtener el bachillerato (1934), se trasladó a la cercana Stralsund para trabajar en la banca comercial. En 1936, dirigía una sucursal del Banco de Pomerania en Demmin. En 1939, era representante comercial en Hamburgo de la firma holandesa de hidrocarburos Shell. Tras la ocupación de Polonia en octubre de ese año, marchó a los yacimientos petrolíferos de Galitzia. En 1940, era jefe de contabilidad de la sociedad Beskiden-Erdöl-Gewinnungs (una filial de Shell), en Krosno (Polonia). Gracias a fervientes nazis de su familia, en 1941 conoció en una cena a Alfried Krupp (1907-1967), por entonces uno de los directores de la producción bélica alemana a través del consorcio siderúrgico Fried. Krupp AG, y también a Reinhard Heydrich, jefe de la Gestapo y arquitecto de la “Solución Final” (el exterminio judío). En aquellas fechas, Alemania invadía la URSS, por lo que el jerarca nazi apuntó lo necesario de controlar las refinerías polacas. Entonces, Beitz ofreció de manera entusiasta sus servicios y fue nombrado director comercial de Karpathen-Öl AG, en Boryslaw (hoy Ucrania). Allí constató sobrecogido los brutales progromos contra la numerosa población judía de la zona, protagonizados por las SS y los nacionalistas ucranianos. Se dedicó a salvar la vida de todos los judíos posibles: unos mil (entre 1942 y 1944). Dada la importancia estratégica de su empresa, se las arregló para pasar como técnicos vitales a simples sastres y peluqueros, sacando a muchos de los trenes hacia una muerte segura en Auschwitz, Treblinka o Mauthausen. Incluso, ocultó judíos en su propia casa. En 1944, dejó Polonia acompañando el repliegue alemán ante la ofensiva soviética. Fue movilizado como suboficial, si bien finalizó la guerra de soldado raso. Cautivo hasta 1946, los ocupantes norteamericanos le nombraron vicepresidente de la Oficina de Inspección de Seguros en Hamburgo, donde dirigió después la aseguradora Iduna-Germania (1949-1953). En 1953, Alfried Krupp lo nombraba su mano derecha en Fried. Krupp, con buena parte de sus activos destruidos, desmantelados, expropiados o sometidos al control aliado. Para finales de la década, la empresa ya estaba completamente recuperada. En 1967, se hacía cargo de la presidencia, convertida en sociedad limitada (GmbH) y con un capital de 500 millones de marcos. En 1969, se desprendió de sus intereses carboníferos para centrarse a lo largo de la década siguiente en la adquisición y control de fabricantes alemanes de aceros especiales y de maquinaria relacionada con la construcción y la ingeniería. Grandes logros fueron el radiotelescopio de Effelsberg (1971), el más grande del planeta con 100 metros de diámetro y alcance de 12 billones de años luz, y la cubierta del Estadio Olímpico de Munich (1972), la mayor del mundo (78000 m2). En 1976, el gobierno iraní adquirió el 25 % de las acciones, incrementándose el capital a 700 millones de marcos en 1978. En 1982, fue reorganizada como un “holding”. Las empresas subsidiarias dejaron de ser formalmente departamentos operativos para adquirir plena independencia. La compañía matriz se encargaba de la dirección estratégica y dejaba a las demás responsables de sus propias ganancias. En los 80, continuó el proceso de diversificación al controlar en 1985 el accionariado de Werner & Pfleiderer, empresa de Stuttgart dedicada a maquinaria para la industria química y alimenticia. Igualmente, se deshizo de sus intereses navieros y en 1987 cerró el complejo de Rheinhausen, concentrándose la actividad siderúrgica en Bochum (aceros de alta aleación, fabricación de planchas y tubos). También participó en la primera locomotora alemana de alta velocidad (1985). En 1989, Beitz se retiraba de Fried. Krupp., aunque permaneció como presidente honorario (1990) y luego también de ThyssenKrupp (1999). En 1971, la Autoridad para la Memoria del Holocausto le reconoció como “Justo entre las Naciones”. Ha sido vicepresidente del COI (1984-1988) y recibido sendos doctorados “honoris causa” por las universidades de Greifswald (1983) y Cracovia (1993).

 

Autor y editor: Luis Fernando Blázquez Morales

BIBLIOGRAFÍA

FRIZ, Diana Maria: Alfried Krupp und Berthold Beitz. Der Erbe und sein Statthalter; Zürich, Orell Füssli, 1988.
SCHMALHAUSEN, Bernd: Berthold Beitz im Dritten Reich; Essen, Pomp, 1991
IMÁGENES:
www.wdr.de/themen/wirtschaft/personen/beitz_berthold/_img/portrait3_beitz_400h.jpg
http://www.thyssenkrupp.com/independent/zoom_image.html?id=405&lang=en (cubierta del Estadio Olímpico de Münich)
http://www.krupp-ag.com/independent/zoom_image.html?id=407&lang=en (locomotora)
http://www.thyssenkrupp.com/independent/zoom_image.html?id=377&lang=en (radiotelescopio)